Por qué el uso frecuente de cannabis puede mejorar las relaciones amorosas de las mujeres — pero no las de los hombres
Un nuevo estudio realizado en Israel sugiere que las mujeres que consumen cannabis de forma intensa tienden a sentirse más satisfechas con sus relaciones amorosas. Para los hombres, sin embargo, el efecto puede ser el contrario.
La investigación, publicada en la revista científica Drug and Alcohol Dependence, fue llevada a cabo por académicos de la Universidad de Ariel y el Colegio Académico Achva. En total, participaron 110 parejas que respondieron cuestionarios sobre sus patrones de consumo de cannabis, satisfacción con su relación de pareja, calidad de la vida sexual y percepción de la atención emocional de sus compañeros sentimentales.
Los resultados fueron claros: las mujeres que usaban cannabis con mayor frecuencia reportaron una mayor satisfacción general con sus relaciones. También percibían tanto a ellas mismas como a sus parejas como más emocionalmente disponibles y receptivas.
“El uso intensivo de cannabis se asocia con una mayor satisfacción de pareja entre las mujeres”, señalan los autores.
En contraste, los hombres que consumían cannabis de manera intensiva informaron niveles más bajos de satisfacción y de conexión emocional, aunque algunos de estos hallazgos aún no alcanzan significación estadística y requieren más estudio.
La importancia de la compatibilidad en el consumo
Uno de los aspectos más interesantes del estudio es el papel que juega la compatibilidad en el consumo de cannabis. Las parejas que consumen de manera similar —ya sea en frecuencia o cantidad— tienden a tener relaciones más estables y satisfactorias. Por el contrario, una diferencia notable en el uso puede estar relacionada con menor satisfacción, especialmente en lo sexual.
Esto concuerda con la llamada teoría de la compatibilidad, que sostiene que compartir actividades de ocio refuerza la conexión emocional y la inversión en la relación.
“Cuando las parejas consumen juntas, se generan más momentos de conexión. Pero si hay una gran diferencia en el consumo, pueden perderse esos espacios de intimidad”, explican los investigadores.
Cuestión de roles y autenticidad personal
Los autores también plantean que las mujeres que consumen cannabis intensamente podrían estar alejándose de los estereotipos de género tradicionales, lo cual puede tener un efecto positivo en su bienestar emocional. Actuar de forma más auténtica, sin ajustarse a lo que se espera culturalmente, puede fortalecer la autoestima y, con ello, la calidad de la relación.
En el caso de los hombres, el consumo elevado suele estar vinculado a mayores riesgos —como problemas de salud mental, conflictos y aislamiento— que pueden deteriorar tanto su bienestar personal como la calidad de sus relaciones.
Aún quedan preguntas abiertas
Los autores reconocen que estos resultados no son definitivos y llaman a realizar estudios más amplios y diversos. La interacción entre cannabis, género y relaciones humanas es compleja y merece una mirada más profunda.
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Este estudio se suma a un creciente cuerpo de investigaciones que analizan cómo el cannabis influye en nuestras relaciones, hábitos y bienestar. Descubre más en nuestros artículos sobre cómo las bebidas con cannabis podrían reducir el consumo de alcohol y la relación entre videojuegos y consumo de cannabis en adultos jóvenes.
Preguntas frecuentes (FAQ)
¿Qué se entiende por “uso intensivo de cannabis”?
Se refiere al consumo frecuente y/o en grandes cantidades, normalmente a diario o casi todos los días.
¿Qué es la “responsividad percibida de la pareja”?
Es la percepción de cuánto una persona siente que su pareja la escucha, la comprende y responde emocionalmente a sus necesidades. Es clave para la satisfacción en la relación.
¿En qué consiste la “teoría de la compatibilidad”?
Es una hipótesis que afirma que compartir actividades —como el consumo de cannabis— puede fortalecer la conexión emocional en una relación de pareja.
¿Qué son los “análisis diádicos”?
Son métodos estadísticos que analizan simultáneamente los datos de ambos miembros de una pareja, permitiendo estudiar cómo influyen el uno en el otro.